Criterios para el diseño del sitio web institucional

Los cimientos de nuestro Sitio

Cada Instituto es único: la manera de relacionarse entre los que forman parte de la comunidad educativa, sus carreras, sus especialidades, sus cursos extracurriculares, sus investigaciones, sus aulas, sus espacios y geografía… todas estas características lo enmarcan y le dan su impronta particular.

El nodo institucional no será una excepción, de a poco irá tomando forma para adecuarse a esta identidad y así acompañar la realidad propia de cada Instituto. Dicha identidad hará que el nodo se desarrolle según las necesidades y realidades propias de cada lugar. En unos, el  sitio institucional será el que marque el rumbo, mientras que en otros, será el uso del campus el que lo dinamice.

El Sitio Web es una ventana de la Institución hacia afuera. Lo que presentemos en él será visto por todos los que accedan a su dirección (sin utilizar una clave o un usuario). Ello permite acercar nuestras ofertas de formación, así como aquellos materiales o ideas que deseamos comunicar a toda la comunidad educativa: datos institucionales, fechas de inscripción, noticias del Instituto o de interés general, investigaciones, publicaciones.

Por ejemplo, si nuestro nodo es nuevo debemos darle nuestra Identidad Institucional. ¿Cuál es el logo del Instituto? ¿Qué colores de fondo utilizaremos para el diseño general? ¿Cuál es el nombre que mostraremos en la página principal del sitio? ¿Utilizaremos el sitio? ¿Utilizaremos el campus? ¿Utilizaremos ambos?

La participación del Facilitador, webmaster en el sitio y en el campus, está vinculada a los acuerdos institucionales. No necesariamente debe hacerse responsable “de todo”, sino que cada webmaster puede tener un área de responsabilidad, de acuerdo a las políticas institucionales.

Debe quedar claro que el webmaster tiene permisos para administrar el nodo, pero no es el dueño del nodo. Lo que se hace o no depende de los acuerdos institucionales logrados y de la aprobación del equipo directivo.

¿Y si nuestro nodo tiene ya producciones?

En este caso, nuestro desafío será darle un nuevo impulso a lo ya producido, sumar energías y aportar nuevas manos a las que actualmente llevan adelante la tarea.

Suele suceder, cuando el nodo “posee vida”, que la tarea se acrecienta y se recarga el trabajo de uno o dos facilitadores. Al sumarnos, podemos colaborar con lo ya hecho, primero armando un grupo de colaboración y luego viendo aquellos aspectos que podemos optimizar, reactivar, complementar, tanto en el sitio como en el campus.